Lo ideal es cortar el calabacín con una mandolina o con algún aparato específico para esta función. Yo compré uno hace tiempo por muy poco dinero, pero no he logrado adivinar cómo funciona (solo consigo destrozar el calabacín) y otros que he visto en la red me parecen muy caros, así que lo he hecho a mano, con el cuchillo. Como éramos tres a comer se hace un poco pesado y no lo he partido demasiado fino, pero no ha estado mal. (Meses después ya tengo un aparato que me resulta comodísimo y quedan geniales)
Podemos usar solamente el calabacín o como hemos hecho hoy, añadirle unos espaguetis de verdad que hervimos previamente pues necesitan más tiempo. El calabacín se hierve unos tres minutos y después se saltea con muy poco aceite, unos ajos picados pequeños, una cayena y le echamos también pimienta negra molida. Mis chicos le han añadido queso rallado pero yo no porque era parmesano. Un poco de queso light no está de más, pero no tenía.
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